Al contrario de lo que piensan muchos, conducir bien o de manera eficiente incluye a veces revolucionar un poco el motor. La creencia popular suele ser que el buen conductor utiliza marchas largas cuando en realidad este tipo de conducción puede llegar a causar daños en tu coche. Revolucionar un poco el motor en determinados momentos puede evitar que el coche consuma más.
Habituar el motor de un coche diésel a circular por debajo de las 2.000 revoluciones puede acumular suciedad la cual afecta negativamente a su el rendimiento. Por esta razón es recomendable revolucionar el motor del coche en ciertas circunstancias y así eliminar el exceso de carbonilla.
Situaciones en las que revolucionar el motor es favorable
Hay al menos cuatro situaciones que describimos a continuación:
– Al subir una pendiente: si notas que el coche no puede mantener la velocidad por más que pises el acelerador, es el momento de reducir marchas y aumentar las revoluciones, seguramente por encima de 2000 rpm. El motor irá mas desahogado y aunque parezca lo contrario trabajará de manera más eficiente. También evitarás que se te cale en plena subida.
– En las incorporaciones: Este es un buen momento para aprovechar y revolucionar un poco el motor. Te ayudará a ganar velocidad, necesaria para la incorporación a la autovía y para no estorbar a los demás conductores.
– En los adelantamientos: Por supuesto, en ese instante en el que adelantas un coche, bajar una marcha y aumentar revoluciones te dará la velocidad necesaria para hacerlo de manera rápida y segura.
– Al bajar una pendiente pronunciada: si en este tipo de bajadas circulas con marchas cortas alargarás la vida de las pastillas de freno ya que utilizarás el freno motor. También tendrás más control sore tu vehículo.
No olvides mantener al día las revisiones de tu coche para un mejor control y funcionamiento del motor. En Talleres Colbo estamos a tu disposición para ayudarte a que tu coche sea más eficiente y evitar averías innecesarias. Contáctanos.
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